Para el mes de noviembre, las iglesias y templos de Venezuela abrirán nuevamente sus puertas para recibir a los creyentes. Así lo informó la vicepresidenta Delcy Rodriguez, quien además dejó claro que a pesar de esto se deben cumplir las medidas de seguridad pertinentes.
En ese sentido explicó en medio de una reunión sostenida con líderes religiosos de país las decisiones tomadas en torno a ese tema. “Sostuvimos una reunión con los líderes religiosos de Venezuela donde expusimos la decisión de flexibilizar a los cultos y actividades religiosas”.
Muchos de los feligreses deseaban recibir dicha noticia, por tal motivo Rodriguez enfatizó que las medidas serán tomadas “con máxima cautela” para ofrecer a los venezolanos “la paz interna” que requiere.
Asimismo informaron que a partir de noviembre, las actividades religiosas serán incluidas en la semana de flexibilización.
Aquellas iglesias que tendrán privilegios serán las que tengan espacios abiertos. Mientras que las demás deberán mantener sus puertas y ventanas abiertas. El uso de aires acondicionados está prohibido ya que sea determinado que es una vía de contagio del COVID-19.
Explicó que se debe mantener el distanciamiento social, y el uso de antibacterial y alcohol es obligatorio. Además está prohibida la aglomeración de personas.
Recalcó que «Nunca pensar en el lleno total de un establecimiento religioso, siempre pensando en máximo un 40% de aforo de los establecimientos religiosos y en el caso de hacerlo al aire libre también».
Dijo que deben tener mucho cuidado con los adultos mayores, porque estos son la población más sensible al coronavirus.