Una madre y una niña sacada a la fuerza en Chinacota-Colombia al estar atrasada por 2 meses en su alquiler. Repugnante e indignante la situación que atraviesan hermanos venezolanos que están siendo desalojados a pesar de las medidas tomadas por el Gobierno de Colombia.
En medio de la cuarentena impuesta en el país se ha vuelto imposible laborar, el principal sustento de los migrantes venezolanos se encuentra en su trabajo diario en las calles, sin embargo ante la dificultad de no poder hacerlo se han atrasado en sus pagos.
Muchos no tienen a donde ir, viven con sus familiares y pequeños hijos lo que impide que se vayan a la calle, casos como estos suceden a diario bajo la mirada incluso de los gobernantes de Colombia que no hacen nada al respecto, deberían respetar los derechos humanos.
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Estamos de acuerdo don el hecho de que los arrendatarios tienen derecho a percibir sus ingresos por la mensualidad de su alquiler, sin embargo es importante tener un poco de humanidad y sensibilidad, estamos pasando por una situación que así lo demanda.
A todas estas el llamado es a la sensibilidad social, a la solidaridad sobre todo con aquellos casos donde hay niños de por medio, porque al final ellos son los más afectados.
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