Que triste que en el mundo existan personas que abusen de la inocencia de un niño, o que personas que se esconden detrás de la imagen de Dios se comporten como inhumanos y despreciables.
Una niña de solo 11 años había sido abusada Se*ualmente varias veces por un cura, sin embargo cuando se dirigía a los adultos para expresar su problema nadie le creía, es por eso que utilizó su celular para capturar en el acto al agresor.
En la grabación de la pequeña residente de un pequeño pueblo cercano a Nápoles, se escucha como el sacerdote Michele Mottola, de la Parroquia Trentola Ducenta, abusa de ella, quien le pide que se detenga, pero él responde: “se trata de un juego, no hacemos nada malo”.
La Estampa, informó sobre un diario íntimo de la menor, donde escribió detalles sobre los abusos sufridos. La familia de la víctima pudo reunir las pruebas.
El obispo lo único que hizo fue suspender a Mottola se le pohíbio celebrar públicamente la misa y entrar en contacto con los fieles.
Sin embargo esto no quedó impune, la Fiscalía de Nápoles realizo las investigaciones pertinentes, dejando como resultado el arresto de Mottola quien confesó sus delitos: “Soy culpable, me disculpo con la familia de la niña”.
Existen muchos casos como estos en todo el mundo ocurriendo, casos en los que no se hace justicia debido a que no se logra encontrar pruebas o que los padres no creen en sus hijos, es importante denunciar oportunamente las irregularidades.
No permitir que los menores de edad pasen tiempo con personas desconocidas, sin importar que aparenten ser personas religiosas o de principios.